El outsourcing es una herramienta que permite contratar a un proveedor externo a la empresa para la ejecución de actividades secundarias, como la limpieza o el correo, o abarcar otras áreas de la empresa, como los sistemas financieros o contables o el área de recursos humanos.

¿Qué ventajas aporta el Outsourcing a mi empresa?
- Focalización en la actividad principal: El outsourcing permite a la empresa enfocarse principalmente en el negocio y no consumir recursos humanos y financieros en otras áreas que no son estratégicas para su actividad principal. Así se logra un mayor rendimiento al evitar distracciones innecesarias.
- Transformación de costes fijos en variables: La externalización permite reducir las inversiones en infraestructuras y tecnología a través de la contratación de determinados servicios a un proveedor externo. Esta contratación conlleva el establecimiento de un precio fijo, por lo que podremos obtener una previsión detallada del coste del servicio.
- Reduce el riesgo: El outsourcing traslada parte del riesgo empresarial en sectores clave, como el financiero, o en nuevos servicios, como aquellos relacionados con la tecnología, a proveedores externos especializados. Además, reduce el riesgo al evitar grandes inversiones iniciales en infraestructura o tecnología, lo que amplía la capacidad de destinar recursos a proyectos nuevos.
- Mejora la calidad: Contratar determinados procesos complejos mediante proveedores externos con conocimientos específicos en esas materias, nos aseguran un resultado de calidad.
- Aumento de la productividad: El trabajo a realizar se realiza automáticamente, a través de una empresa especializada en esa área, reduciendo el tiempo de realización de los proyectos a no perder tiempo en selección de personal, formación o adquisiciones de equipo. Ejecutar el mismo trabajo en un menor plazo aumenta de forma significativa la productividad empresarial.
- Mejora los procesos de innovación: Al reducir costes y tiempo en la ejecución de determinadas actividades, la empresa dispone de más recursos para innovar y así comenzar nuevos proyectos que puedan posicionarla en un puesto clave dentro del mercado competitivo.
- Mayor flexibilidad: El Outsourcing nos facilita adaptarnos a los cambios que se producen en el mercado, contratando servicios con terceros solo en el momento en el que lo necesitemos, como en aquellas operaciones que se deban ejecutar estacionalmente.
- Acceso a las últimas tecnologías: Contratar a una empresa de outsourcing adecuada nos permite disponer de la tecnología más novedosa sin tener que hacer grandes inversiones en equipos o en formar a personal especializado en las mismas. Si nuestra empresa cuenta con las últimas tecnologías podrá iniciar nuevos proyectos de forma inmediata.